lunes, 25 de abril de 2016

Sartre me visitó esta mañana

Me encuentro en una época de tránsito entre dos visiones del arte, o más bien entre dos modos de disfrutarlo. Me preguntaba por qué me costaba la cordura terminar un libro desde hace tantísimo tiempo, siendo que antes los devoraba uno tras otro sin cansarme nunca. Mi mente me dicta conquistas e invasiones irracionales de todo pensamiento de libertad; pero yo no me siento libre. 
Una etapa contemplativa de mi vida luchaba por cerrarse en contra de mi consciencia, mi corazón y sus deseos, y finalmente lo hizo, sin que yo pudiera hacer nada por evitarlo. Ahora, más que nunca, más que nada, mi subconsciente, mi psicología me inducen la apetencia de crear. Me empujan a la necesidad de escribir luces y sombras, pintar alaridos eróticos. Dibujar voces, redactar madrugadas, narrar miradas y estallar en latidos. Esta es la pura esencia de mi actual voluntad, o involuntad, más bien, porque adoro contemplar... Y nunca seré libre sin poder elegir admirar e idear al mismo tiempo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario